Avances en Biología Molecular
Estos pensamientos dejan zurcos.
Es tal la carga emocional que llevan que uno puede seguir sus huellas desde su origen en la Glándula de Platus hasta su destino en el Hipocampo de Decarté, detrás del lóbulo frontal.
Los zurcos que dejan en el sistema nervioso cerebral son de tal envergadura que le bloquean el paso a los glóbulos epidurales, encargados del transporte de nuestras emociones.
Es por ello que cuando tienes muchos de este tipo de pensamientos aumenta el riesgo de un bloqueo emocional arterial, que puede resultar en un ataque de Histeresis si es que se rompe este coágulo de manera repentina.
Estos pensamientos dejan zurcos.
Hacen que nuestra visión interna se enfoque exclusivamente en la imagen proyectada detrás del lóbulo frontal, no dejando ver lo que está frente a nuestros ojos.
Esto provoca a su vez una ceguera de segundo grado que tiene severas consecuencias a nivel social. El desafío interno es poder volver a girar la mirada desde el lóbulo frontal a la retina, suavizar las huellas de estos pensamientos sin sentido, y dejar que las emociones fluyan nuevamente por las arterias de tu corazón.
Amo esta nueva biología molecular.
El Descuidista